Validan chile habanero bajo condiciones de casa sombra

Notas
Typography

Validan por segundo año consecutivo, chile habanero en el sur de Sinaloa.Se esperan obtener mayores beneficios con la producción de chile habanero en el sur de Sinaloa

Con la finalidad de ofrecer alternativas de cultivos rentables al productor, Fundación Produce Sinaloa, A. C, por segundo año consecutivo, apoya a través de su Consejo Consultivo zona sur, al proyecto Validación de variedades de chile habanero bajo condiciones de casa sombra en el sur de Sinaloa; dicho proyecto busca aumentar la rentabilidad del cultivo de chiles mediante el sistema de protección de casa sombra.
   Con este proyecto se busca identificar al menos una variedad que tenga  tolerancia a plagas y enfermedades superior a 10%. Por lo anterior, se espera contar con el paquete tecnológico que se genere de acuerdo con lo analizado.
   Al efectuarse el cultivo bajo condiciones de casa sombra, se disminuiría hasta en 60% el número de aplicaciones de pesticidas químicos, esto quiere decir que de 8 aplicaciones que normalmente se realizan al mes en campo abierto (32 litros de pesticida), se reducirían a 3 por mes, equivalente a 12 litros por mes. Esta disminución se debe básicamente a la protección que ofrece la casa-sombra.
   Por otra parte, aumentarían las ganancias a 418 mil 280 pesos, y si se considera que el costo de producción es de 80 mil pesos, entonces la ganancia neta sería de 332 mil 280 pesos por hectárea, con el sistema propuesto.

Paquete tecnológico
De acuerdo con el ejercicio 2009-2010, se generó el siguiente paquete tecnológico:
   1. Preparación del sustrato. El 2 de septiembre se mezcló un costal de tierra para invernadero (kekilla), cuatro cubetas de vermiculita, tres cubetas de jal y dos cubetas de tierra de lombriz; esta combinación permitió el aprovechamiento de sus nutrientes y un buen desarrollo de la planta. El costo fue de 430 pesos.
   2. Siembra en charolas de 200 cavidades. Se utilizaron charolas de poliuretano de 200 cavidades, que fueron llenadas con la mezcla de tierra previamente humedecida y posteriormente se pasó un rodillo para compactarla y dejar el espacio para depositar la semilla. La siembra se realizó de forma manual. Las variedades que se sembraron fueron  Kukulkán, Chichén Itzá y Jaguar. Una vez sembradas fueron tapadas con una mezcla de tierra para invernadero y vermiculita y regadas hasta la saturación. Las charolas regadas se taparon con un hule para fomentar la germinación de la semilla por el aumento de la temperatura y evitar la deshidratación. El costo fue de 260 pesos.
   3. Riego de plántulas en invernadero. El 10 de septiembre de 2009, las charolas fueron trasladadas al invernadero para iniciar su crecimiento y se regaron diariamente por las mañanas para evitar su deshidratación a la hora en que sube la temperatura. Esta actividad se realizó manualmente con una regadera. El costo fue de 130 pesos.
   4. Fertilización de plántulas en invernadero. El 20 de septiembre se inició la fertilización sumergiendo las charolas en una solución de dos mililitros de ácido húmico por litro de agua, dos mililitros de magnesio, hierro y zinc por litro de agua; además, dos mililitros de la fórmula de fertilizante orgánico 10-14-0 por litro de agua. Debido a que no se obtuvieron los resultados esperados, se realizó una segunda sumersión con los mismos productos y dosis, pero agregando más cantidad de potasio orgánico: dos mililitros por litro de agua (tampoco hubo resultados).
   Luego de 35 días de permanecer en invernadero, no se observó desarrollo vigoroso de las plántulas de la variedad Jaguar, por lo que se realizaron aplicaciones foliares diarias de nitrógeno foliar (dos gramos por litro de agua) y dos mililitros de ácido húmico por litro de agua.
   Se efectuó una aplicación similar, pero agregando dos mililitros de enraizador por litro de agua y después se bajó con un riego ligero. Con estas aplicaciones, el tamaño, color y consistencia de la plántula mejoraron. El costo fue de 280 pesos.
   5. Manejo de malla sombra. El 30 de noviembre la malla sombra fue colocada por encima de las charolas para evitar el golpe directo del sol (no fue necesario hacer retiros diarios, ya que el sol penetra por los lados). El costo fue de 130 pesos.
   6. Preparación del terreno. Para dejar el terreno de la casa sombra en condiciones adecuadas para el trasplante, el 10 de diciembre se ejecutó un paso de arado para aflojar perfectamente el terreno. Después se dieron dos pasos de rastra para dejarlo en condiciones de formar camas grandes. El costo fue de 900 pesos.
   7. Formación de camas. El 11 de diciembre se formaron las camas de plantación con una máquina encamadora. La distancia entre cada una de ellas fue de un metro cincuenta centímetros. El costo fue de 200 pesos.
   8. Instalación del sistema de riego y acolchado. El 14 de diciembre se instaló el sistema de riego por goteo; se utilizó una cinta calibre seis mil, con perforaciones a cada 20 centímetros y un gasto de 1.92 litros por hora, por metro lineal. Después se colocó el plástico de acolchado sin perforaciones, calibre 90 (ambas actividades fueron realizadas manualmente). El costo fue de cuatro mil pesos.
   9. Trasplante. El 15 de diciembre se trasplantó con palas a doble hilera, con separación entre plantas de 30 y 40 centímetros entre hileras, así se obtuvo una densidad de plantación de 41 mil 666 plantas por hectárea. El costo fue de dos mil 250 pesos.
   10. Control de plagas y enfermedades. El 16 de enero de 2010 se realizó el control de plagas y enfermedades, tomando en cuenta monitoreos en campo de la presencia o ausencia de ellas en el cultivo.
Durante enero se detectó la presencia de gusano peludo y se aplicaron 150 mililitros de insecticida Tracer por hectárea. El tercer día se dio una segunda aplicación con un kilogramo por hectárea de Lorsban 75 (clorpirifos) y 250 mililitros de cypermetrina por hectárea. El costo fue de mil 500 pesos.
   11. Fertilización en campo. Después de seis días de trasplantado el cultivo se procedió a la fertilización en campo con productos a base de fósforo y productos promotores del desarrollo radicular (de la raíz): dos litros de Rooting por hectárea, cuatro kilogramos de fosfato monoamónico (MAP) por hectárea y tres kilogramos de urea por hectárea. Esta fertilización se realizó el resto del mes de diciembre, con aplicaciones una vez por semana.
   En enero se fertilizó con ocho kilogramos de urea por hectárea, ocho kilogramos de nitrato de potasio por hectárea, seis de fosfato monoamónico y seis kilogramos de nitrato de potasio por hectárea. Los fertilizantes se aplicaron vía sistema de riego para fortalecer el crecimiento vegetativo y promover la floración y el amarre de fruto; dichos productos fueron aplicados dos veces por semana.
   Durante febrero se fertilizó (vía sistema de riego) con 10 kilogramos de nitrato de potasio y ocho kilogramos de nitrato de calcio por hectárea.
   También se aplicaron productos para el amarre de fruto vía foliar: tres litros de calcio más boro (de forma quelatada)  por hectárea; la aplicación se hizo cada tercer día a partir de la segunda quincena de febrero, para tratar de contrarrestar el crecimiento vegetativo y aborto de flores provocado por exceso de humedad de las lluvias. El costo fue de 10 mil 200 pesos.
   12. Tutoreo o envarado. Para sostener el cultivo de manera erguida, el 28 de febrero de 2010 se colocaron varas a cada dos metros, dos líneas de estacas por cada cama. Conforme creció la planta se colocaron hilos como soporte de cada una de ellas, evitando el contacto con el suelo. El costo fue de 20 mil pesos.
   13. Control de plagas y enfermedades. El 16 de marzo se presentó araña roja (Tetranichus urticae) y causó algunos daños. Esto ocurrió durante la floración y amarre de fruto, provocando la caída de hojas viejas. La plaga se controló con aplicaciones de 500 mililitros de Agrimec 1.8 CE por hectárea; la aplicación fue dirigida hacia el envés (cara inferior) de la hoja y se procuró que la presión de la bomba no bajara de sus niveles más altos.
   También se presentó ácaro blanco (Steneotarsonemus latus) durante la etapa de floración y amarre de fruto. La plaga se alimentó de los retoños más nuevos y provocó deformaciones de hojas y tallos. Para su control se realizaron dos aplicaciones de 500 mililitros de Agrimec 1.8 CE por hectárea. La aplicación fue dirigida hacia los retoños más nuevos, procurando que la presión de la bomba (de motor) no bajara de sus niveles más altos. El costo fue de tres mil pesos.
   14. Fertilización en etapa productiva. El 13 de abril, durante la etapa productiva, la fertilización se basó en fertilizantes para el desarrollo de fruto, se aplicaron ocho kilogramos de nitrato de potasio por hectárea, cinco de nitrato de calcio, tres kilogramos de nitrato de magnesio por hectárea, cinco litros de nitrato de magnesio por hectárea, cinco de ácido fosfórico y 0.5 kilogramos de microelementos por hectárea. La fertilización se mantuvo todo el periodo de producción, aplicada una vez por semana y distribuida en tres riegos durante ese mismo lapso. El costo fue de 15 mil 480 pesos.
   15. Cosecha. La cosecha se realizó manualmente en canastos durante el mes de mayo. Para determinar el rendimiento por hectárea, se realizaron muestreos de cinco metros lineales por tres repeticiones para cada variedad.
   La variedad Kukulkán presentó el mejor rendimiento, con 18 mil 760 kilogramos por hectárea. La variedad Chichén Itzá produjo 17 mil 67 kilogramos y la variedad Jaguar alcanzó 16 mil 389 kilogramos por hectárea. El costo fue de cuatro mil 500 pesos.

   Con información proporcionada por Juan Alberto Santoyo Juárez, responsable del proyecto Validación de variedades de chile habanero bajo condiciones de casa sombra en el sur de Sinaloa, e integrante del Centro de Validación y Transferencia de Tecnología de Sinaloa (CVTTS), A. C.