El laboratorio incluye cuatro equipos de automatización masiva que permitirán procesar un gran número de muestras de bacterias de manera rápida y eficaz para obtener productos biológicos para combatir a Fusarium
En Sinaloa se instaló y está en marcha un laboratorio de robótica destinado a evaluar la capacidad de bacterias para inhibir el desarrollo y crecimiento de Fusarium en maíz, de acuerdo con información del proyecto Obtención y evaluación de un banco de germoplasma de microorganismos nativos de Sinaloa asociados a maíz para desarrollar bioprotectores para el control de Fusarium, apoyado por Fundación Produce Sinaloa, A. C., en el ciclo 2008-2009.
Para la instalación del laboratorio se acondicionó un área en el Centro Interdisciplinario de Investigación para el Desarrollo Integral Regional (CIIDIR), unidad Sinaloa.
Este laboratorio cuenta con 10 espacios de trabajo para el personal y un área de campana de flujo laminar para el manejo estéril de las bacterias con capacidad de control sobre Fusarium. También posee equipos de refrigeración, congelación y ultracongelación, necesarios para generar y mantener a las bacterias por largos periodos (hasta décadas); tiene una campana de extracción de humo para el manejo de reactivos de alto riesgo, como solventes o ácidos que generan vapor que resulta peligroso para los trabajadores; y cuenta con un área parcialmente aislada en donde se colocó un set doble de dos equipos de automatización masiva (robots) de la marca Qiagen.
El set incluye dos robots denominados Qiacube y dos Qiagility, que permitirán procesar un gran número de muestras de bacterias de manera rápida y eficaz y automatizarán el proceso del ensayo de la capacidad de control sobre Fusarium ?in vitro? (?tubos de ensayo?) para miles de muestras en corto tiempo.
Estas actividades deberán conducir a la obtención de herramientas de control de fusariosis en maíz y a desarrollar agentes de control biológico de forma más rápida.
Importancia económica del maíz en Sinaloa
De acuerdo con la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, en Sinaloa se siembran 500 mil hectáreas con maíz, de donde se consiguen 12 mil millones de pesos.
Para mantener la rentabilidad del maíz en Sinaloa es que se trabaja en el desarrollo de un producto biológico que combata eficazmente y en armonía con la naturaleza enfermedades que puedan tener un impacto económico importante en la productividad de este cultivo, como es el caso de la fusariosis.
En la planta de maíz, el hongo Fusarium puede provocar amarillamiento, marchitez, achaparramiento y su muerte.
Obtención de los microorganismos
Para la obtención de las 10 mil bacterias con potencial de control sobre Fusarium se realizaron muestreos en cinco lotes de maíz, en los que se presumía presencia del hongo.
El primer muestreo se efectuó el 18 de febrero de 2009 en El Serrano, Salvador Alvarado, y dos en Angostura (en Alhuey y 18 de Diciembre). El 20 de marzo de 2009 se muestrearon otras dos parcelas en Guasave (en Casa Blanca y La Trinidad).
En cada uno de los lotes se tomaron 10 plantas completas (cinco enfermas y cinco sanas) y suelo próximo a ellas. La raíz de la planta se muestreó con pala (a una profundidad de cero a 30 centímetros). Cada muestra fue etiquetada para su procesamiento en laboratorio, en donde se obtuvieron grupos de bacterias que han sido reportados como agentes de control de Fusarium: Bacillus sp., ácido-lácticas, Actinomicetales y del orden Pseudomonadales.
Prueba de severidad de Fusarium en maíz
De las muestras de plantas con signos de fusariosis se tomaron pedazos de tallos y raíces, en los que se verificó la presencia de Fusarium. En las muestras en que se constató la enfermedad, se aisló al hongo y se motivó su crecimiento para posteriormente registrar su severidad en maíz.
Para verificar la voracidad del hongo en maíz se utilizó una tabla de índice de severidad previamente establecida (donde 1 significa que la planta no presenta signos de fusariosis; 2, amarillamiento leve y marchitez; 3, amarillamiento moderado y achaparramiento; 4, amarillamiento severo, marchitez y achaparramiento; y 5, muerte de la planta.
Hasta agosto de 2009 se han detectado tres aislados de Fusarium de diferentes tejidos de plantas de maíz que, en la escala de severidad, resultaron con mayor voracidad en plántulas de maíz, con un valor de 5 en la escala de severidad.
Con información proporcionada por Ignacio Eduardo Maldonado Mendoza, integrante del Centro Interdisciplinario de Investigación para el Desarrollo Integral Regional, unidad Sinaloa.